Azazel se reúne en secreto con los demonios de la capital, informándoles de que dispone de la fuerza del Dragón Rojo. Nina, sin ser consciente de la declaración de Azazel, se va de compras por la ciudad con Mugaro. Kaisar, desesperado por la actual situación de los Caballeros de Orleans y de la propia ciudad se reúne con Rita.